martes, 17 de diciembre de 2013

EL BUNKER SURVEY Y LOS ”MAGIC PIPES”




Hace poco tiempo y durante un Bunker Survey descubrimos un “Magic Pipe” también denominado “Ilegal  Pipe”.

El Bunker Survey se realizaba en un Bulk Carrier con Jefe de Máquinas de nacionalidad Griega.

Los dos Surveyors que realizábamos la inspección de combustible, debido a una serie de circunstancias, sospechamos que un tanque de Fuel Oil, cuya sonda se encontraba en la Sala de Máquinas del buque, no era lógico que se encontrara  prácticamente vacío.

Tras solicitar una botella de gasoil y echarla en el tubo de sonda, observamos que el nivel de la sonda del tanque subió considerablemente, sin motivo aparente, ya que debería haber sido la misma.

Esta prueba fue crucial para continuar con la sospecha de que algo extraño ocurría con la sonda de ese tanque, por lo que se solicitó desmontar parte del tubo de la sonda y la sorpresa fue la existencia de un “Magic Pipe”, es decir, un tubo dentro del tubo de sonda y cerrado por su parte inferior.


                     Parte del tubo de sonda fue desmontado a requerimiento de los Surveyors

Una vez extraído el “Magic Pipe” se comprobó que en el tanque existían 245 metros cúbicos de fuel oil (aproximadamente 230 toneladas), cuando se nos había informado que el tanque estaba prácticamente vacío.

Aunque para mí era la primera vez que descubría un “Magic Pipe” parece ser que este sistema es bastante utilizado en algunos tipos de buques con tripulantes de nacionalidades muy específicas.


   El “Magic Pipe” instalado en el interior del tubo de sonda

Hasta ahora los Marine Surveyors efectuábamos los Bunker Survey, pero actualmente están apareciendo los “Detectives de Bunker Survey”, es decir, Surveyors especializados en la búsqueda y medición de combustible y que algunos clientes no tienen inconveniente en enviar a cualquier lugar del mundo, ya que su rentabilidad es innegable, a la vista de los hechos relatados.

 “El Magic Pipe” encontrado dentro de la sonda de un tanque de combustible de fuel oil.

Que un Jefe de Máquinas que tiene un sueldo a final de mes se avenga a efectuar este tipo de “chanchullos”, se entiende que con la connivencia del Capitán y del Armador, resulta un tanto llamativo y desde luego cuando se descubren estos casos, tanto el Jefe de Máquinas como el Armador quedan bastante “retratados”.

CORRIMIENTOS DE CARGA A BORDO DE LOS BUQUES




Este tema está relacionado con la estiba y el trincaje de la mercancía a bordo de los buques.
Unas buena estiba, en la mayoría de los casos facilita el trincaje de la mercancía. En el momento de estibar la mercancía se deberá de tener en cuenta la resistencia del lugar en el que se apoya la mercancía.

En general se puede afirmar que los corrimientos de carga a bordo de los buques se suelen producir a consecuencia de varios factores, entre los que suele destacar el mal tiempo encontrado por el buque durante el viaje marítimo (fundamentalmente en los meses de invierno), pero siendo el factor determinante por lo general un trincaje insuficiente o inadecuado de la mercancía.

El trincaje cuesta dinero, factor a tener en cuenta, por lo que si bien hay que efectuar un trincaje de la mercancía adecuado y suficiente, tampoco hay que colocar demasiadas trincas en exceso, aunque mas vale colocar unas trincas de mas que de menos. El problema reside en que generalmente quien paga el trincaje, suele estar interesado en que sea lo mas económico posible, pues en muchos casos su responsabilidad no queda comprometida si se produce un corrimiento de carga.




Máquina de 20 tons de peso y 2 X 1 m. de base cargada en un contenedor viejo, sobrepasando 4 veces el peso/m2 recomendado.

La empresa que efectúa el trincaje, el Surveyor que lo supervisa y el Capitán del buque suelen estar interesados en que el trincaje sea adecuado y suficiente, ya que en el caso de que se produzca el corrimiento de la carga que se trinca, se verán involucrados y pueden ser responsables de los daños que se produzcan. Por este motivo en muchos casos existe una preocupación de estas partes hasta que el buque llega a destino “sano y salvo”

Generalmente siempre que se produce un corrimiento de carga en un buque, la responsabilidad del Capitán está comprometida. Habitualmente los Capitanes firman un documento a la empresa que ha realizado el trincaje, antes de salir de puerto, en el que se hace constar que el trincaje se ha efectuado a satisfacción del Capitán. Además el hecho de salir a navegar, de alguna forma es una aceptación del trincaje realizado, pues en caso contrario no debería salir de puerto. Si además se tiene en cuenta que el Capitán puede disminuir o aumentar la velocidad del buque según las circunstancias, cambiar el rumbo y entrar o no de arribada en un puerto de refugio o en un lugar resguardado, en caso de encontrar mal tiempo, su responsabilidad siempre estará cuestionada.

Como los Capitanes de los buques no suelen ser expertos en trincaje, para algunos casos es conveniente que estén asistidos por un Supercargo con experiencia, para que supervise el trincaje de la carga, o bien por un Surveyor cualificado y con experiencia que asesore al Capitán.


Buque Ro-Ro con una escora de 27º debido al corrimiento de la carga

Los corrimientos de carga en los buques de carga general, o en un flat rack, contenedor cerrado, open top, etc.,  se producen con relativa frecuencia, sobre todo cuando los buques navegan con mal tiempo y se producen balanceos y cabezadas. En algunas navieras los Capitanes exigen un Certificado de trincaje de cada flat rack que se va a embarcar, emitido por un Surveyor cualificado y con experiencia, siguiendo normas de la Naviera.

En el caso de los contenedores, el corrimiento de la carga en los mismos no se suele producir en los buques oceánicos (buques grandes), los cuales se mueven relativamente poco, sino en los buques pequeños (feeders) que son los que se suelen mover con mayor facilidad.

Durante los años de ejercicio como Marine Surveyor he visto verdaderas catastrofes, habiendo atendido cientos de corrimientos de carga, tanto en contenedores cerrados, como en flat racks, open top, carga general, etc.

En los contenedores cerrados, la regla de oro consiste en no dejar espacios libres, es decir, que la estiba sea compacta, asegurando con madera, eslingas de nylon, sacos de aire, etc, la mercancía susceptible de moverse dentro del contenedor. El concepto seria aplicable también para la bodega de un buque.

   Buque que perdió parte de la cubertada de tubos desde Izmir a Tarragona

En ocasiones y para economizar, los contenedores open top (OT) se suelen utilizar para transportar mercancías pesadas o voluminosas, en lugar de utilizar un flat rack, sin tener en cuenta que dichos contenedores no están preparados para transportar mercancías pesadas, ya que la resistencia de las argollas existentes en dichos contenedores suele ser de aproximadamente una tonelada.
Hay que pensar que en los buques porta contenedores el Capitán no efectúa la estiba y que muchos de los contenedores con maquinaria pesada y mercancías que sobresalen a los lados del flat rack o en altura, deben de estibarse o bien en bodega a última altura o bien en cubierta a última altura, con lo que las aceleraciones que debe de soportar el flat rack o el open top suelen ser muy elevadas, ya que para un mismo periodo de balance el recorrido es mayor cuanto mayor sea la altura a la que se estiba.
Además el suelo de los contenedores tiene una resistencia limitada de 3 tons/metro lineal en los contenedores de 20’ y de 4,5 tons en los de 20’. También hay que considerar que el peso en ambos lados (derecho e izquierdo) del contenedor debe de ser equitativo, que el contenedor no debe de llevar mas del 60% del peso de la mercancía desde el centro hacia ninguno de los dos extremos y que el centro de gravedad no debe de sobrepasar la mitad de la altura del contenedor.

Los flat racks se suelen utilizar para la carga de mercancías pesadas o voluminosas y están provistos de argollas a ambos lados para poder efectuar un trincaje adecuado.


   Corrimiento de contenedores en un buque pequeño y sin guías en bodega.

Los siniestros por corrimiento de carga suelen tener un alto coste, pues además del daño que se puede producir a la mercancía trincada/asegurada, se pueden producir daños a otras mercancías, contenedores y/o al buque,  con posibles demoras del mismo, etc, etc.

Para alguien que no ha navegado resulta difícil imaginarse los movimientos de un buque durante un temporal.

El Marine Surveyor debe de tener conocimiento sobre el material de trincaje que se suele utilizar, tipos de cables, cintas de nylon, tensores, resistencia de todos los elementos, lugares donde se deben de soldar cáncamos (evitando soldar sobre algún tanque de combustible), dirección en que se deben de soldar los cáncamos, como colocar los pernos, resistencia del plan de la bodega y de las escotillas del buque, como se deben de trincar las diferentes mercancías, número de trincas aconsejables, etc, etc.
Existe numerosa bibliografía al respecto.

Especialmente peligroso resultan las cubertadas de tubos, los paquetes de melamina en bodegas que no sean box (cuadradas o rectangulares), las mercancías con el centro de gravedad alto, mercancías pesadas con poca base, mercancías que no dispongan de lugares para trincar, etc.

Probablemente las inspecciones de trincaje junto con las de remolque son las que comprometen en mayor medida la responsabilidad de un Marine Surveyor.