jueves, 20 de septiembre de 2012

QUIEN INTERVIENE CUANDO SE PRODUCE UN SINIESTRO MARITIMO




El mundo marítimo es un mundo muy complejo, incluso para las personas que llevan mucho tiempo dedicándole parte de su vida. Solo quien ya ha intervenido en un siniestro marítimo conoce el procedimiento a seguir y quien o quienes suelen intervenir.

Los siniestros marítimos pueden ser de muy diversa índole y siempre son diferentes, puesto que suele cambiar las circunstancias, es decir, el lugar, el buque, las partes involucradas, etc

Cuando se produce un siniestro marítimo en el que se encuentra involucrado un buque, el Capitán suele informar a la persona de seguridad de la compañía naviera a la que pertenece el buque, el cual indica al Capitán  como debe de proceder.

Existen representantes del P&I (Compañía de seguros de RC) del buque afectado en todos los puertos importantes. En ocasiones el contacto con dicho representante lo efectúa el P&I, tras ser informado por el Armador, o bien contacta con dicho representante el Capitán afectado, aunque en muchos casos suele hacerlo a través del Consignatario.

En algunos casos, cuando existe una polución por ejemplo, el Capitán del buque también informa con carácter de urgencia a Port Control (Torre de Control de Sasemar).

Buques NEW GLORY y MILENIUM DOS involucrados en una colisión, cerca del estrecho de Gibraltar, en Enero del 2012

A su vez el representante del P&I suele requerir los servicios de un Marine Surveyor, el cual generalmente en un intervalo de aproximadamente una hora desde que se produce el accidente y es avisado del mismo, se persona en el buque para constatar las evidencias del siniestro, tomar fotos, video, etc, recopilar documentación y alegaciones relacionadas con el siniestro, aconsejando al Capitán como debe de proceder en lo relativo al siniestro.

Lo relatado hasta ahora y las partes involucradas formarían parte de un primer capítulo, pues dependiendo de tipo de siniestro también habrá que avisar a los bomberos (caso de un incendio) a una compañía de buzos, en caso de embarrancada por ejemplo, y así sucesivamente.

Por su parte, en los casos en los que se encuentre involucrado un segundo buque (colisión por ejemplo) o Terminal portuaria (daños durante la carga y/o descarga), cada una de estas partes, también procederían de forma similar, requiriendo los servicios de un Marine Surveyor, usualmente tras dar parte del siniestro a su compañía aseguradora.

Además se puede ver involucrada la compañía de seguros de casco y máquinas del buque, en los casos de daños al buque, interviniendo también la sociedad de clasificación del buque. Si se trata de daños a la carga, intervendrían las compañías aseguradoras de la carga y así sucesivamente.

Si el caso lo requiere, porque es importante o porque se presume que puede acabar en los tribunales, las partes pueden designar abogados marítimos, pero además en muchos casos, sobre todo en los casos importantes, suele intervenir la Autoridad Portuaria y Capitanía Marítima.



El buque MSC FLAMINIA incendiado en el Atlántico en el mes de Julio del 2012

Un caso típico en el que intervienen múltiples partes en un siniestro marítimo, seria el caso del incendio del buque MSC FLAMINIA en el Atlántico, acaecido el pasado mes de Julio.

No acaba ahí la cosa, pues como muchos buques están fletados e incluso existen sub-fletadores, también intervendrían sus P&I, nombrando Marine Surveyors y Abogados si procede, en los casos de años a la carga, en los que hubiesen emitido el B/L.

También se verían afectados en este último caso, de daños a la carga,  los Transitarios que hubiesen emitido el HB/L (House Bill of Lading) de mercancías afectadas en el siniestro, quienes también deberían dar parte a sus compañías aseguradoras de RC (Responsabilidad Civil).

Podemos ver, que en muchos casos, las partes involucradas en un siniestro marítimo son múltiples y cada una de ellas, en defensa de sus intereses,  requerirá a un Surveyor, generalmente a través de su compañía aseguradora. También es esta quien determina generalmente en que casos procede nombrar abogado.

Durante mis años de Marine Surveyor he vivido casos en los que han intervenido multitud de Surveyors y Abogados Marítimos en un solo caso, sobre todo en siniestros de buques porta contenedores con daños a la carga y casos de colisiones entre buques.

Que hacer, como actuar, o a quien avisar, etc., son preguntas que muchos Consignatarios se plantean tras ser informados de que en uno de los buques consignados se ha producido un siniestro.

martes, 18 de septiembre de 2012

EL MARINE SURVEYOR (PERITO MARITIMO) - 18.09.2012




El Marine Surveyor es una persona que se dedica a inspeccionar (peritar) siniestros marítimos, aunque el trabajo que suelen realizar es mucho mas amplio y entre otros suelen efectuar inspecciones de entrega y reentrega de buques, bunker survey, calculo de peso por calados, inspecciones de trincaje (aseguramiento de la carga), controles de carga y descarga de buques y contenedores, realización de informes técnicos en disputas marítimas, etc, etc.

Habitualmente el Marine Surveyor (Perito marítimo) es un Capitán de la Marina Mercante, ya que el hecho de haber navegado es de gran ayuda a la hora de investigar a bordo de un buque las posibles causas de un siniestro (entrada de agua en la bodega, corrimiento de carga, colisiones de buques, etc.,). Los años de experiencia y la titulación son elementos determinantes en el estudio de siniestros marítimos, asistencia a juicios relacionados con reclamaciones en el ámbito marítimo, etc.

Suele ser bastante habitual el ejercer este tipo de trabajo de forma autónoma o bien en compañías de Marine Surveyors en las que suele haber dos o tres Surveyors solamente. Dependerá de la importancia del puerto y de la especialización del Marine Surveyor, la forma de desarrollar la actividad.

Marine Surveyor comprobando la sonda de un tanque de combustible de un buque

En los años 80 y 90, los requerimientos a los Marine Surveyors eran muy frecuentes, debido al coste de los Peritajes, edad de los buques, franquicias muy bajas de las compañías aseguradoras, etc. En la actualidad solo se requiere a los Marine Surveyors para casos muy concretos, como pueden ser temas técnicos, daños de consideración al buque o a la carga, entrega y reentrega de buques, etc. Por lo demás y debido a la crisis y a la evolución del mundo marítimo, el número de Peritajes ha ido disminuyendo de forma sistemática. Como en todas las profesiones, existen Marine Surveyors con éxito, que suelen tener mucho trabajo, pero no es la norma general.

Los que nos dedicamos a los siniestros marítimos a veces somos vistos con suspicacia por una parte de la comunidad portuaria pues nos relacionan con los siniestros, sobre todo por parte de los que se han visto involucrados en algún siniestro marítimo.

Los clientes necesitan un Peritaje que les sirva de ayuda, pero si el mismo no cumple con las expectativas, difícilmente el cliente volverá a llamar al Marine Surveyor para un caso similar.

Los Marine Surveyors somos personas bastante conocidas en los puertos, por parte de los Consignatarios, Armadores, compañías aseguradoras, etc. También nos conocen los Capitanes de los buques que han tenido incidentes. Cada Marine Surveyor tiene un nombre y un determinado prestigio.  El mundo marítimo es bastante pequeño y los que llevamos tiempo trabajando en el mismo, solemos conocernos. Los Marine Surveyors y los Abogados maritimistas formamos parte de ese mundo marítimo, que nos reclama en momentos en los que los clientes suelen necesitar ayuda.




Marine Surveyor comprobando las temperaturas de los kiwis en un buque frigorifico


¿Por qué un cliente, generalmente una compañía de seguros, requiere a un Marine Surveyor determinado cuando acaece un siniestro?

Las compañías aseguradoras suelen trabajar con varios Marine Surveyors (Peritos) y requieren a uno en concreto para un caso determinado en función del tipo de siniestro, importancia del mismo, etc. Para una colisión de buques es habitual requerir a un Capitán de la Marina Mercante, mientras que para controlar la reparación de un buque suelen requerir a un Jefes de Máquinas o a un Ingeniero Naval.

En los siniestros marítimos importantes son las compañías de seguros y los P&I quienes requieren a los Marine Surveyors.

Los Marine Surveyors, cuando actuamos en litigios marítimos, a menos que nos requiera el Juzgado, somos Peritos “de parte”, por lo tanto enfocamos los temas desde el punto de vista que interesa al cliente. Es obvio, de no ser así no nos requerirían.

El mundo marítimo engancha, tanto si los que trabajan en él son marinos, como si no lo son., es algo que siempre me llamó la atención y eso a pesar de que para muchos es un trabajo bastante esclavo. En mi caso suelo tener el móvil encendido durante las 24 horas del día, los 365 días al año. De vez en cuando me llaman un festivo, de madrugada o cuando menos me lo espero y siempre suelen ser temas urgentes. Los siniestros no tiene fecha prevista y ocurren cuando ocurren. Cuando suena el móvil uno ya está mentalizado para recibir cualquier tipo de información, como puede ser el hundimiento de un buque, una colisión entre buques, incendio a bordo, etc,.  

Supongo que mucha gente joven no le encontrará ningún sentido a este tipo de trabajo, en el que a veces hay que trabajar los festivos, de noche y siempre se programan las vacaciones con muy pocos días de antelación para no volver a perder otro billete de avión o hay que terminar las vacaciones antes de tiempo, pero todo eso forma parte de una forma de vivir la vida y si no te gusta este tipo de trabajo mejor dedicarse a otra cosa.

lunes, 17 de septiembre de 2012

EL ABANDONO DE BUQUES EN PUERTO - 17.09.2012




¿Porque un Armador abandona a un buque y a su tripulación en un puerto?

 Usualmente los buques que son abandonados en puerto, previamente han sido detenidos por la Autoridad Marítima, quien suele imponer al Armador del buque el pago de una cantidad económica o bien exige subsanar una serie de anomalias encontradas en el buque.

Cuando un Armador no puede cumplir con las condiciones que se le impone o bien no le interesa, puede acabar abandonando al buque y a la triùlación en un puerto. Las dos circunstancias que suelen concurrir  en el abandono de un barco en puerto suelen ser : Exigencias economicas muy altas al Armador, que en ocasiones no puede cumplir y buques relativamente pequeños y viejos.

En la mayoría de los casos y de acuerdo a mi experiencia de los últimos 30 años, casi siempre se trata de buques de unos 80/120 metros de eslora, con mas de 25 años de edad. El caso del SEAWIND CROWN en Barcelona fue una excepción, al tratarse de un crucero de 195 metros de eslora.

Buque que permaneció en el puerto de Barcelona varios años antes de dirigirse a la India en el año 2003 para ser desguazado.

La causa inicial puede ser una inspección por parte de Inspección de Buques de una Capitanía Marítima, en la que se encuentran deficiencias importantes, acompañada en ocasiones de una infracción. En el caso del “ISTANBUL B” acaecido en Tarragona hace unos meses, se trata de un caso de polución en el que la Capitanía Marítima le impuso una multa, que junto con los gastos de limpieza, la deuda del Armador ascendía a 655.000 €, probablemente una cantidad superior al valor del buque. Además el Armador no disponía de póliza de P&I, por no haber abonado el importe de la póliza en los últimos meses.

Buque actualmente abandonado en Tarragona

Además los gastos que  se van generando suelen ser como una bola de nieve, es decir, van aumentando día a día, por el coste del atraque, consumo de gasoleo en puerto, etc, etc.
El procedimiento siempre suele ser el mismo, es decir, durante unos meses permanece a bordo toda la tripulación, con la creencia de que el problema se puede arreglar y podrán cobrar sus salarios y con el tiempo se dan cuenta de que no existe solución al problema y van abandonando el buque.

Buque “SAMY” (Ex IRA) permaneció varios años abandonado en el puerto de Barcelona, hasta ser desguazado en el 2007. A bordo de este buque se rodó una pelicula.

Pero con el abandono de un buque, no solo sale perjudicada la tripulación, sino que al puerto se le crea un problema importante, pues se encuentra con un buque, que prácticamente no tiene ningún valor, ya que este tipo de bu  ques por su tamaño y peso no son apetecibles para los desguaces de Turquia, India o China, al costar mas el remolque a dichos lugares que el valor del buque. Además debido a la falta de mantenimiento durante el tiempo que el buque permanece amarrado en puerto sin tripulación, el mismo se convierte en un amasijo de hierros oxidados y con abundante corrosión.

El problema se multiplica si el buque fue construido con anterioridad al año 1984 y contiene amianto, que era lo habitual, utilizado como aislante en la sala de máquinas. La subasta por parte del juzgado de un buque de estas características acaba muchas veces en fiasco. Son barcos irreparables por su edad, cuyo único destino es el desguace, pero hace tiempo que en España no existen desguaces de buques. Siempre hay algún aventurero, inexperto, que cree que va a hacer el negocio del siglo con la compra de un buque de estas características (Un Onasis cualquiera), hasta que se informa un poco y desiste en su aventura.

                                 Buque abandonado en Barcelona y que fue desguazado en el 2008.

Además el puerto nunca cobrará el atraque del buque y el mismo genera un riesgo de hundimiento, incendio, etc, por lo que habitualmente los puertos no suelen ver con buenos ojos la detención de un buque, por el problema que les crea.

En ocasiones estos buques permanecen amarrados en puerto varios años antes de que puedan deshacerse de ellos.

En puertos pequeños, donde los atraques son siempre necesarios, la detención de un buque puede llegar a ser un problema grave.

Es evidente que los Armadores nunca abandonan un buque nuevo o de mucho valor, porque además suelen disponer de compañías aseguradoras y P&I solventes, que les pueden ayudar a solucionar el problema.

Buque abandonado en Barcelona durante mucho tiempo y que zarpó en 2008, con destino desconocido.

Durante los últimos 25 años he peritado muchos de estos buques abandonados, siempre en compañía de otra persona, pues se trata de buques abandonados, en los que hay que efectuar la inspección con linterna (no hay luz), en un ambiente tétrico y en los que siempre me quiero imaginar a la gente que ha ocupado los camarotes, las historias que se han vivido y contado, etc. En ocasiones he encontrado cartas de familiares o de alguna novia, en alguno de los cajones de los camarotes de la tripulación.

El hundimiento de un buque debido a un siniestro es muy triste, pero el final de un buque abandonado en puerto, sin tripulación, sin luz y a la espera de su desguace no desmerece. Alguno de estos buques tiene suerte, como le ocurrió al SAMY (Ex-IRA), un buque abandonado en Barcelona hace unos 10 años, que fue utilizado para rodar una película.